Marcelo Olivas Torres es docente de la Facultad de Artes, ahí comparte sus conocimientos con los alumnos en las materias de Arte Textil y Confección de Vestuario, con las que busca además rescatar las tradiciones textiles mexicanas como es el bordado, tejido en telar de cintura, entre otras manualidades.

Confió que estas actividades llevan, además, un mensaje implícito: “También los hombres podemos tejer y bordar, ya no debe haber esas limitantes en las que la sociedad decía que era una actividad sólo para mujeres”.

Olivas Torres reiteró que desde su trinchera está luchando por una reconstrucción social sobre el género, principalmente para que la población reconozca a las personas como seres iguales y acabar con los conflictos actuales.

“El Textil es un espacio que permite que nos sentemos y tengamos un espacio de reconciliación y de paz”, expuso.

Con el apoyo de la Universidad ha logrado hacer viajes académicos y artísticos dentro y fuera del país. Uno de ellos fue a China, a través de una beca otorgada por el Instituto Confucio, con la que participó en varios foros artísticos y llevó varias propuestas al Distrito del Arte.

“Son viajes que te ayudan a reconocerte como chihuahuense y a valorar todo lo que haces por trascender en tu trabajo. En China estuvieron asombrados por el trabajo textil, por la forma de tejer a mano y eso ayudó a que conocieran parte de nuestra identidad mexicana”.

Finalmente, pidió a la comunidad universitaria y a la sociedad en general que no tengan limitantes y que el área textil, el bordado, puede ser un reto importante para que hombres y mujeres tengan una sana convivencia y paz interior.

Actualmente es el encargado de museografía y artes visuales del Centro Cultural Universitario Quinta Gameros, por lo que la protección del patrimonio histórico de más de 112 años depende de él y del equipo que se encarga de su conservación.