Aún y cuando las contracturas son lesiones comunes, pueden pasar de una simple molestia a lesiones graves completamente invalidantes.

La coordinadora del Departamento de Fisioterapia de la Facultad de Ciencias de la Cultura Física de la UACH, maestra Georgina Ortega Contreras, define la contractura como una lesión involuntaria y permanente de uno o más grupos musculares.

Hacer mucho esfuerzo, levantar cosas pesadas, el sedentarismo, una inadecuada postura, la deshidratación o inclusive el mismo estrés, pueden ser causa de una contractura muscular.

Según la especialista en fisioterapia, las contracturas cervicales y lumbares (región de la espalda) son las más frecuentes; las primeras se presentan por una rigidez en el cuello al mantener una postura inadecuada en la computadora, el celular o viendo televisión.

Por otra parte, las lesiones lumbares se pueden dar por levantar cosas pesadas o una falta de higiene postural.

La contracción es un mecanismo de adaptación del cuerpo a una actividad, por lo que es importante que si usted sufre de una contractura, aplique inmediatamente calor en la zona, haga estiramientos y un masaje.

Si las molestias persisten se recomienda no automedicarse y acudir con el doctor para que valore la gravedad de la contractura.

La coordinadora del Departamento de Fisioterapia de la FCCF hace las siguientes recomendaciones para evitar esta lesión:

1.-Mantener una correcta postura al estar sentado con la espalda y tronco erguidos.

2.-Maneja el estrés.

3.-Aliméntate sanamente.

4.-Bebe al menos 2 litros de agua diarios.

5.-Evita movimientos bruscos o exagerados.

6.-Realiza al menos 30 minutos de actividad física diariamente.